lunes, 29 de enero de 2018

Lactancia y alimentación complementaria a los 13 meses

Nuestra pequeña E. ya tiene 13 meses y cada vez va comiendo mejor. De momento solo hemos conseguido que coma alimentos sólidos a mediodía y por la noche. Por las mañanas le damos una galleta para chupar mientras nosotros desayunamos, pero solo la lame o chupetea un poco y acaba tirándola. Lo cierto es que a esas horas le doy el pecho cada vez que lo pide, hasta que se vuelve a quedar dormida. Después ya despierta casi para la hora de comer. No merienda nada en particular, más bien sigue con el pecho a demanda y en ocasiones come algo de fruta con nosotros si es que no la ha comido a mediodía. De momento ya nos parece todo un logro conseguir que coma dos comidas principales con nosotros, y gracias a eso podremos comenzar a espaciar un poco la lactancia entre toma y toma, para que ella se acostumbre a estar más tiempo sin comer (a día de hoy le cuesta mucho aguantar 3 horas, y a veces solo lo consigue si duerme una siesta entre medias o está muy distraida y yo no ando cerca).

La comida:

En contra de lo que muchos opinan aún, la lactancia materna justo antes de comer favorece que nuestra hija coma mejor, al menos a nosotros nos funciona bien así. El pediatra de E. nos llegó a recomendar hace meses que la dejáramos sin comer un par de horas para que luego lo cogiera con ganas, pero al intentarlo lo único que conseguimos es que estuviera muy nerviosa y quejicosa en la trona, que tirara toda la comida al suelo y acabara llorando de desesperación. Una y no más. Ahora siempre le doy el pecho antes de sentarla en la trona y se queda tan feliz, dispuesta a probar casi cualquier cosa que le demos de comer, eso sí, si no es de textura cremosa.

Normalmente le damos algo de carne bien picada, porque no mastica, solo lo marea un poco de lado a lado en la boca y lo traga. Puede comer, pollo, merluza, dorada, conejo, cordero, ternera... Cualquier tipo de carne que sea jugosa y blandita, preferiblemente a la plancha (pues cocido queda mu seco) y sin sal.

Como es una niña que nunca ha comido papillas de cereales (hemos sido incapaces de conseguir que las comiera) ella come pan (de trigo, de espelta, o su preferido de centeno). A veces lo chupa, otras lo mordisquea e incluso va sacando las migas a pellizcos con los deditos y se las va comiendo.

Pan
Intentamos acompañar la carne con algo de verdura, pero es una asignatura pendiente el conseguir que la coma. Antes le gustaba la zanahoria y el brócoli, y ahora ni eso. Y si le damos de nuestras cremas de verduras pone cara de asco e incluso le dan arcadas, con lo buenas que son! Nos han recomendado que probemos añadiéndole un quesito, así que ya veremos a ver...

De postre fruta. Desde que tenía 5 dientes, y más ahora que ya tiene 6, come mucho mejor la fruta. Lo que siempre le ha gustado ha sido la pera y el caqui, pero ahora ya come fresas, manzana, piña y naranja. Este fin de semana retomaremos la famosa fruta de los niños, el plátano, que no sé por qué, no le acaba de gustar. La fruta siempre se la damos en forma de gajo para que ella pueda agarrarla y comerla. No le gusta la fruta machacada (como con los purés, todo lo que sea pringoso y en cuchara lo rechaza). Lo que sí que le gusta a veces y viene muy bien para llevar a la calle es la compota de fruta preparada para tomar por una boquilla, como la de la foto. De esa manera ella no ve que pringa y la va comiendo.

Fresas
Manzana







Durante toda la comida le ponemos su taza de aprendizaje con agua, porque evidentemente le entra sed, y ya sabe pedírnosla señalando con el dedo, pero sin duda lo que más le gusta es que al terminar me la vuelvo a poner al pecho.

Por la tarde: 

E. toma lactancia materna a demanda, lo cual le ayuda a dormir una siesta de tarde. Lo que estamos comenzando a cambiar, ahora que come mejor, es que si hace calor y nos pilla en la calle le damos agua, y solo si paramos a merendar o a tomar algo en algún lugar recogido, y se pone muy "pesada" le doy el pecho, pues hasta ahora sacaba el pecho en cualquier lugar y momento que me pillara, ya fuera sentada, de pie o incluso caminando, pero queremos intentar espaciar un poco más las tomas, como he comentado antes.

Ikea


La cena:

Al igual que en la comida, le doy el pecho antes de sentarla a la trona. Le intentamos dar proteína y lácteo (a parte de la lactancia materna, evidentemente). Suele comer algo de carne que le haya quedado de mediodía, jamón cocido, tortilla francesa... Si nosotros comemos algo de fruta, pues también partimos un buen trozo para ella. Y de cereales le ponemos arroz cocido, que normalmente lo come bastante bien cogiéndolo ella con sus deditos. En alguna ocasión conseguimos que coma bocados más grandes dándoselo nosotros en una cuchara, pero al cabo de un rato ya nos la rechaza y pasa a cogerlo ella misma con sus manos. Es verdad que así nos pone el suelo lleno de arroz y es un engorro, pero da gusto ver cómo se afana por coger ella la comida y llevársela a la boca, demostrándonos lo capaz que es.

Y al terminar siempre se come un yogurt. Cuando cumplió 11 meses empezamos a ver que este tipo de lácteo le gustaba, así que le dábamos unas cucharadas del nuestro antes de comer nosotros, cuando aún no habíamos echado azúcar ni nada. Al cumplir el año ya se comía medio envase de yogurt (siempre natural y sin azúcar) y a día de hoy, que tiene algo más de 13 meses, puede llegar a acabárselo por completo. De esta forma evito darle el pecho nada más terminar y ya me espero a que la vayamos a acostar, después del baño y de jugar un poco, así yo estoy más cargada de leche y cuando va a dormir toma de los dos pechos y mucha cantidad.

Yogurt
De noche:

Seguimos colechando así que se pasa la noche mamando cada poco. Normalmente no me deja dormir más de una hora seguida (hasta las 4 de la mañana) y luego ya duerme unas dos horas seguidas antes de volver a demandar pecho.

Planes de futuro:

Seguimos ofreciéndole cada día verdura pero no le vamos a obligar a comerla, así que solo nos queda tener un poco de paciencia y pensar que algún día pasará igual que con la fruta y acabará comiéndola. 

Otra cosa pendiente es conseguir que tome leche de fórmula, pues yo llevo un año "atada" a la niña, y eso me daría un poco más de libertad, incluso para poder hacer algún plan con mi chico que durara más de 3 horas, pues E. no aguanta más de ese tiempo sin mamar. Esta es otra de las razones por las que queremos espaciar un poco más la lactancia materna entre toma y toma, para que él no lo pase mal y nosotros podamos estar solos para ir al cine, o salir a cenar, mientras E. se queda con alguna de sus abuelas. Y digo leche de fórmula porque aunque tiene 13 meses y ya podría tomar leche de vaca, no alimenta igual, y de lo que se trata es de sustituir alguna toma de leche materna por algo que sea similar a nivel nutritivo, y solo la de fórmula lo es. Sacarme yo la leche también sería una solución, pero no demasiado válida si tenemos en cuenta que como hacemos lactancia materna casi a demanda no suelo tener una buena carga de leche en el pecho como para extraerla.

Conseguir que duerma sola en su cuna... Pero siendo sinceros, esto no lo vemos posible hasta que no deje la lactancia materna y se acostumbre a dormir varias horas seguidas. Que lo que tiene esta niña es que se mueve mucho por la noche y como se desvela lo más fácil es darle teta para que vuelva a dormirse.

También te puede interesar:



No hay comentarios:

Publicar un comentario